los americanos Justin Thomas y Jordan Spieth se impusieron este sabado en la séptima edición de ‘The Match’, que disfrutaron junto a su compatriota Tiger Woods y al irlandés Rory McIlroy en el Pelican Golf Club de Belleair (Florida, EE.UU.). Todos los beneficios recaudados en el evento (2.605.000 dólares) serán donados para ayudar a la restauración de los daños ocasionados por el huracán Ian que devastó la costa oeste de Florida el pasado septiembre.
Los cuatro golfistas fueron afrontando los retos de cada hoyo para alcanzar los objetivos que proponía cada espónsor para sumar su donación a la causa. El evento, disputado por la noche y con luz artificial, se celebró en pleno cruce de declaraciones en los días previos entre la cabeza visible del LIV Golf, el australiano Greg Norman, y la pareja formada por Woods y McIlroy. Para Woods, el diálogo entre ambos circuitos pasa por la renuncia de Norman, un mensaje que apoyó también el norirlandés. Desde la dirección de LIV Golf se inició un diálogo entre el propietario Norman y Tiger.
Ninguno de los participantes, todos ellos ellos integrantes del circuito de la PGA, realizaron declaraciones relacionadas con LIV Golf ni en la previa ni durante la disputa del partido, durante el cual tuvo su microfono abierto en todo momento. Otros años involucrados en el circuito saudí como Phil Mickelson hizo un guiño este mismo sábado al ‘The Match’ ha recorrido en Twitter. “Estoy orgulloso de haber formado parte de la creación del evento”, dijo al confirmar que, pese a no jugarlo en esta ocasión, lo seguiría por televisión.
En lo referente a la competencia, tras un primer hoyo empatado, la pareja formada por Spieth y Thomas tomó ventaja imponiéndose en los hoyos dos, tres y cuatro. El partido se jugó como match-play al mayor de doce hoyos en formato four-ball. Entre los campos de golf más espectaculares figuró el putt de Thomas en el tres, de aproximadamente ocho metros de distancia, para completar su birdie.
El recorrido se realiza en un ambiente muy distendido, with charlas y bromas constants entre ellos y también con un Charles Barkley que ejercía de comentarista. La quinta y la sexta bandera terminaron igualadas y a la mitad del recorrido la pareja formada por Woods y McIlroy todavía no había ganado ningún hoyo. En el séptimo mostró su calidad en el green McIlroy con un putt larguísimo que dio el primer punto para su equipo y que redoujo hasta dos la déventaja con cinco hoyos más por disputa. En la octava volvió la ventaja de tres puntos para Thomas y Spieth con un birdie de este último.
Lo mantuvieron hasta el hoyo diez cuando igualaron el par de McIlroy para conservar la renta a falta de dos banderas y proclamarse ganadores. Tal y como manifestaron antes del inicio, para McIlroy, Thomas y Spieth fue un privilegio jugar junto a Woods, ya que su figura les inspire en su niñez y adolescencia para progresar en la páctica de golf y llegar hasta el profesionalismo. “Una estrella de honor en esto con Tiger, Justin y Jordan. Lo hemos pasado bien y espero que hayamos entretenido a la gente en casa, además con esta buena causa”, afirmó McIlroy, número uno del mundo y el único no estadounidense del partido.
Uno de los grandes atractivos del día era ver de nuevo en acción a un Woods muy limitado en sus movimientos por una fascitis plantar. La oportunidad de bajarse del carrito de golf permite a los aficionados aprender más sobre su swing. El histórico golfista, cuya última participación fue en el Abierto Británico donde no pasó el corte, quiso otorgarle la importancia que merecía a ‘The Match’ y Vistió de rojo, el color que siempre porta en el último día de un gran torneo.
